Llegó hace algunos años a Aixopluc Manresa, una asociación de rescate de perros y gatos. Viví en uno de los parques que tenían y la verdad que estaba muy bien cuidada. Llegó junto a la que era seguramente su madre, pero cuando nosotros la conocimos ya hacía unos años que había muerto. En el momento que nosotros adoptamos a Bait en esta asociación justo habíamos perdido a Jaburcia, la hija de Murci. Como no queríamos que estuviera sola y Carolina también lo estaba, les preguntamos si nos la cederían para que se hicieran compañía entre ellas. Finalmente nos la cedieron y se vino a vivir con nosotros en julio de 2020. Ahora es la jefa de las cabras y la más mayor de todas.