Aproximadamente en marzo o abril de 2021, cuando era muy pequeña, me sacaron a la fuerza con perros de mi madriguera. Unos niños se entretenían jugando conmigo cuando un señor mayor les ofreció cinco euros si me entregaban a él. Los niños accedieron y el señor me llevó a un centro de recuperación de fauna. Allí me curaron las heridas que me hizo el perro que me sacó de mi hogar y también me curaron la infección que tenia en mis ojos. Estuve unos meses en el refugio de fauna hasta que todo el papeleo estuvo en regla para ser cedida al refugio. Como fui criada por humanos, no podía ser liberada ya que no les tengo ningún miedo y eso supone un peligro para mí.
Mi nombre sirve para recordar el buen acto del hombre que me salvó y que tan solo cinco euros fueron los que cambiaron mi destino.